sábado, 9 de octubre de 2010

Día 5: Costa oeste EEUU: Monument Valley, Antelope Canyon, Horseshoe Bend

Esta página del blog describe el día 5 de 17 de nuestro viaje a Costa Oeste de Estados Unidos.

Resumen del día

  1. Visitar el Monument Valley Navajo Park en Arizona.
  2. Viajar hasta Utah, y visitar el Antelope Canyon Navajo Park y la Horseshoe Bend.
  3. Conducir hasta Bryce Canyon City, donde tenemos el hotel para dormir

Es Sábado 9 de Octubre, y hoy tuvimos uno de los días más ajustados del viaje, porque teníamos que ver varias cosas y para todo teníamos reservas por tiempo.

Nos levantamos a las 7:00 de la mañana en el hotel de Kayenta City, con 8º de temperatura. Preparamos las maletas e hicimos el checkout del hotel, tras pelearme con la recepcionista que me había cobrado dos veces el depósito de la tarjeta de crédito. Suerte que tenía WIFI en el hotel y pude darme cuenta antes de salir.

Visita al Monument Valley Navajo Park


Hay que reconocer que inicialmente no íbamos a venir a ver este parque, y ahora que lo he visto se lo recomiendo a todo el mundo. A nosotros nos convencieron de venir otros amigos nuestros que fueron al año anterior.

El parque del Monument Valley para mi es famoso porque es el de los escenarios típicos del Oeste americano, los dibujos animados del Correcaminos y el Coyote que me gustaba de pequeño: desierto, rocas muy elevadas acabadas en acantilados, cactus, carreteras largas interminables,...

Nos paramos un momento a pie de carretera. Podéis ver la comparativa:


A esa hora no había nadie por la carretera. Y el paisaje era totalmente desierto del Oeste. Las vistas desde la carretera, ya antes de llegar al parque, eran espectaculares.


Llegamos con el coche a un cruce para tomar la desviación a la entrada al parque. Aquí la carretera ya no es asfaltada, si no de tierra. Llegamos a las 08:15 y somos de los primeros. No hay casi cola en la garita de entrada. Pagamos dos tickets, pues nuestro Anual Pass sólo es válido para los parques nacionales que son propiedad del Gobierno, y el Monument Valley aún es propiedad de los Indios Navajos.

Una vez dentro del parque, empezamos a hacer la ruta por nuestra cuenta. Aquí ya no hay ni siquiera carretera, si no un camino con el que hay que ir en cuidado con el coche, si era tipo sedán con el nuestro. Hubiéramos ido mejor con un 4x4 por aquí, pero igualmente lo pudimos ver todo bien.

A cada poco rato nos íbamos parando para tomar fotos. Las vistas de las formaciones rocosas de Monument Valley son espectaculares. Igual que si estuviéramos en una aventura de Lucky Luke:


Pasear por Monument Valley fue espectacular. Además estábamos casi solos en todo el parque. ¡Poquísimos turistas!


Si he de quedarme con dos cosas de Monument Valley, destaco el Sentinel Mesa y el Inspiration Point:


Las formaciones rocosas que te vas encontrando en la ruta son impresionantes:


Aquí una foto del camino. En este trozo estaba mejor. Siempre está señalizado con un mapa que nos dieron al entrar en el parque.


Durante el trayecto nos encontramos algunos pequeños ranchos con caballos. Daban la opción de hacer un recorrido por el Monument Valley montado a caballo. Nosotros porque íbamos justos de tiempo, pero hubiera sido una buena experiencia.


Ésta es una foto de Kelita, con el coche de fondo. Como digo, íbamos parando cada poco rato a tomar fotos y grabar vídeo. El paisaje es irrepetible. Es el puro Oeste en esencia:


Al realizar el trayecto de vuelta, fotografiamos de nuevo las partes que más nos habían gustado. Ahora, con más sol:


A las 11:00 aproximadamente habíamos acabado todo el circuito. En total, unas dos horas y media. Ahora teníamos que conducir hasta Page para ver el Antelope Canyon. Antes de salir de Monument Valley, fuimos un momento al Centro de Visitantes, al principio del recorrido y aprovechamos para comprar unos sandwiches por 5 dólares que nos comeríamos por el camino en el coche.

Trayecto de Monument Valley hasta Page


El trayecto en coche desde Monument Valley hasta Page es largo. Salimos a las 11:15 del parque y teníamos que estar en Page a las 12:30-12:45 para empezar la visita al Antelope Canyon.

Hay 200 kms de distancia. No nos hubiera dado tiempo de llegar en una hora y cuarto. Pero los navajos van con unos husos horarios diferentes. Ambos parques están en el estado de Arizona, pero los Indios Navajos aplican en otoño e invierno una hora más en la zona de Monument Valley. Por tanto, al viajar de este a oeste para ir de Kayenta a Page, estábamos ganando una hora de huso. En Google encontraréis más información al respecto si buscáis "diferencia horaria navajos Monument Valley Antelope Canyon".


Llegamos muy bien de tiempo a Page. Las carreteras son muy buenas y no hay casi tráfico. A las 13:15 estábamos ahí, pero en verdad eran las 12:15. La empresa que nos hacía el tour, Antelope Canyon Tours, estaba cerca de una zona muy amplia de estacionamiento, donde aparcamos. El precio de la visita fue de 32 dólares por persona.

Entramos para avisar de que ya habíamos llegado. Recuperaron los datos de nuestra reserva y nos mandaron esperar. Los del negocio eran todo indios: son los propietarios del Antelope Canyon, y los únicos que pueden explotarlo al turismo. Al Antelope Canyon no se puede entrar con vehículo propio, y no se puede visitar por libre, siempre hay que ir acompañado de un navajo.

A la 13:00 nos subimos a las diferentes furgonetas que tenían para llevarnos. Éramos un grupo bastante numeroso de gente, la mayoría japoneses (primera vez que los veíamos en todo el viaje). A nosotros nos tocó ir de copilotos en el coche, así que fuimos delante.

El viaje estuvo divertido. Los indios se pusieron a hacer carreras entre ellos por las dunas de la carretera hasta el Cañón, con las furgonetas, los 4x4, y los remolques. Un poco de teatrillo para los turistas.

Visita al Antelope Canyon Navajo Park


Llegamos al parque a la 13:30. Había bastantes grupos de turistas, cada uno acompañado por un navajo. Esperamos a que acabara el grupo delante nuestro para entrar nosotros.

El Antelope Canyon es más bien una grieta que se ha formado en las rocas. Esta grieta se convierte en un pasillo que cruza un extremo a otro del cañón. Los efectos que hacen los rayos del sol al colarse por las rendijas y aberturas en la roca es lo más vistoso del recorrido, que le dan al cañón unas imágenes únicas.

No somos unos expertos fotógrafos, jugando con las luces, pero aún así salieron unas fotos chulas:


El propio guía fue explicando algunos puntos de la grieta donde las rocas toman formas de cosas: una cara, un águila, etc... También tomaba fotos a la gente del grupo, o te aconsejaba cómo configurar la cámara para sacar mejor partido a las fotos. Pues andas por un pasillo muy oscuro, donde le llega mucha luz desde arriba, y no es fácil tirar bien las fotos.


Al cabo de unos quince minutos, llegamos al otro extremo del desfiladero.


Volviendo por nuestros pasos al extremo inicial, tomamos alguna foto más:


Cuando llegamos al punto de inicio de la visita, le dimos una propina al guía de 5 dólares, por las fotos que nos había tomado, consejos, etc...

Nos subimos de nuevo a los 4x4 e hicimos el regreso a Page.

Visita del HorseShoe Bend


Volviendo a Page, le preguntamos al guía donde estaba el HorseShoe Bend. Es una estribación del río Colorado que toma forma de "U", pareciendo una herradura. De ahí su nombre. Unos amigos nos recomendaron mucho visitarla, y se encuentra a muy pocos kilómetros de Page.

El guía nos explicó cómo se iba, realmente no estaba lejos. Ya eran las 14.30 cuando llegamos, pero como no teníamos hambre por los bocatas que comimos al salir de Monument Valley, decidimos acercarnos un momento.

Llegamos en diez minutos al aparcamiento del HorseShoe Bend. Luego tuvimos que andar por un camino de tierra un cuarto de hora hasta llegar al sitio. Las vistas son espectaculares: un gran acantilado en forma de herradura, con la silueta del río Colorado al fondo. Hay que ir con cuidado para no resbalarse:


Había unos cuantos grupos sueltos de gente viendo la herradura del Río Colorado, pero se podía ver perfectamente bien.

Recomiendo totalmente ir a ver el HorseShoe Bend. Estuvimos un rato más, y luego ya volvimos por el camino de tierra hasta el coche y regresamos a Page, a la calle principal donde habíamos aparcado al mediodía.

Ya eran las 16.00 de la tarde. Así que decidimos comer algo en un restaurante de la cadena Taco Bell, que hay muchos por esa zona. Nos costó 14 dólares los dos. Pero no comimos demasiado bien: pedimos un surtido de tacos de carne y verduras, pero no nos gustó demasiado. La bebida, era gratis y podías llenarla tantas veces quisieras. Vimos en otra mesa a un grupo de gente, obesos, que se metieron como dos litros de cocacola cada uno comiendo. No me extraña que estén asi de gordos.

Pusimos gasolinera en la gas station de al lado de Taco Bell. Compramos siete galones y medio que nos costaron 25 dólares. También compramos zumos y galletas para el viaje.

A las 17.00 de la tarde, cuando empezaba a ponerse el sol, dejamos Page y apuntamos hacia Bryce Canyon City, donde pasaríamos la noche.

Trayecto de Page a Bryce Canyon City


De nuevo, al conducir de Page a Bryce Canyon City tuvimos que tener en cuenta el huso horario navajo, así que perdimos una hora. También cambiábamos de estado, y nos íbamos de Arizona hasta Utah. Fueron 250 kilómetros de viaje, que hicimos en tres horas aunque con el cambio horario fueron cuatro.


Durante el trayecto vimos de lejos el Glenn Canyon y el Lake Powell, sin pararnos. Este viaje se nos hizo bastante largo, sería la última vez que conduciría yo todo el rato. Tuvimos un problema con el GPS que nos desvió de la ruta durante algunos kilómetros, por no posicionarse bien.

Almenos el coche era muy cómodo de conducir, cosa que agradecimos. Comimos alguna cosa en el coche, pero no llegamos a parar. Realmente estuve tres horas seguidas conduciendo.

El tramo final, ya llegando a Bryce Canyon City, fue un poco complicado. Se nos hizo completamente de noche, y además, la carretera era ya muy boscosa, con curvas y había que estar muy atento.

Llegué muy cansado al hotel. Era el Best Western Rubys'inn, y al igual que todos los del trayecto, era típico bungalows rústicos. El hall principal era precioso, parecía una auténtica cabaña de guardabosques. Hicimos el check-in muy rápido, el personal muy amable y además en todo el viaje no tuvimos ningún problema con ningun check-in o check-out de los hoteles.

Nuestra habitación estaba en un bungalow cercano a un lago. Aparcamos el coche y cogimos las maletas. Estaba en la segunda planta y no había ascensor, así que tuvimos que cargarlas.

La habitación, muy pequeña, con un baño sencillo. Nos daba igual, tuvimos tiempo de deshacer la maleta lo mínimo para pijamas, ducha, y a dormir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario